Te suena esto: llega julio, miras la factura de la luz y se te cae el mojito de la mano. Entre el aire acondicionado, el frigo lleno y la lavadora a tope porque todo el mundo va a la playa, te comes un sablazo eléctrico que parece más una multa que un recibo. Pero, ¿y si te dijéramos que con un estudio gratuito podrías pagar parte de tus vacaciones con lo que te ahorras? Suena bien, ¿no?
Aquí van algunas comparaciones reales que hemos visto en nuestros estudios:
1. Ahorro mensual de 30-50€
Traducción: 6 cañas y 3 tapas en la playa.
O lo que es lo mismo, dejar de sudar en casa para sudar bailando en un chiringuito.
2. Ahorro de 300€ al año
Traducción: 4 noches en un apartamento en Cádiz, con desayunos incluidos y vistas a la playa.
La diferencia entre ver las olas por Instagram o en primera fila.
3. Ahorro de 500€ al año
Traducción: viaje a Lisboa con hotel y caprichos.
O dos escapadas rurales para desconectar de la ciudad, del jefe y del enchufe.
4. Ahorro de 700€ o más
Traducción: un verano sin remordimientos.
Helados, gasolina para ir donde te dé la gana, cenas sin mirar el precio y sí, algún regalo que no esperabas.
¿Y qué hay que hacer para eso? Solo enviarnos tu factura. Sin compromiso, sin letra pequeña y sin líos. Si podemos mejorarla, te lo decimos. Y si no, te decimos que ya lo estás haciendo bien.
Así de claro, así de fácil.
Este verano, en lugar de pagar más por quedarte en casa, paga menos y sal a vivirlo.