Lo sabemos. Entender una factura de la luz es como intentar leer un jeroglífico en egipcio antiguo. Kilovatios, peajes, tramos horarios, ajustes del mercado… y al final, una cifra que duele más que el dentista sin anestesia. Pero no te preocupes, que te lo vamos a explicar sin tecnicismos, sin rollos, y sobre todo, sin tomarte por tonto.
Vamos por partes. Tu factura eléctrica tiene tres bloques principales: energía consumida, costes regulados y servicios añadidos. La parte de “energía consumida” es lo que realmente gastas. Ahí se multiplica tu consumo (kWh) por el precio que te cobran por cada uno. Fácil. O debería serlo.
El problema está en que muchas compañías meten tarifas donde lo que pagas por kWh cambia según la hora, el día y hasta la posición de los astros. Si no sabes cuándo enchufar la lavadora o si usar el horno te va a costar más que comer fuera, es normal que te frustres. Por eso es clave saber si tienes tarifa fija o variable, y si realmente te compensa.
Luego están los famosos “peajes y cargos”. Esto es lo que el Estado cobra para mantener las redes eléctricas, financiar renovables, etc. No puedes evitarlos, pero sí asegurarte de que no te los estén cobrando por duplicado o inflados en una tarifa opaca.
También hay compañías que incluyen servicios extra sin que lo hayas pedido. Mantenimiento, asistencia técnica, seguros eléctricos… Cosas que, si no has firmado o no necesitas, están chupándote euros cada mes sin que lo sepas.
Y al final, está el IVA, que ahora mismo es del 21% otra vez. Sí, el Estado también quiere su parte del pastel.
¿La solución? Revisar bien lo que te están cobrando y comparar. Porque lo que debería ser una factura clara y sencilla muchas veces es un monumento al despropósito. Y ahí es donde entramos nosotros.
En Amboss Energía cogemos tu factura, la analizamos línea a línea y te decimos si estás pagando lo justo o si te están vacilando. Si hay una opción mejor, te la mostramos. Y si estás bien, te lo decimos también. Porque no vendemos humo, vendemos ahorro.
Así que si la próxima vez que mires tu factura no quieres que te entren ganas de tirarla a la basura, deja que la miremos nosotros. Gratis, sin compromiso y con la verdad por delante.